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Desmintiendo mitos sobre la protección solar acerca del FPS (factor de protección solar).
En un mundo donde los rayos del sol son cada vez más fuertes y pasamos más tiempo al aire libre, comprender los matices de la protección solar es más crucial que nunca. En Sundo, nos hemos comprometido a mejorar la seguridad solar. Desmintamos mitos y aclaremos la verdadera ciencia detrás del FPS (factor de protección solar) y su papel en nuestra vida diaria.
Conclusiones clave
- Un FPS más alto equivale a mayor protección, pero la diferencia es sutil: el FPS 50 ofrece aproximadamente un 98 % de protección UVB, mientras que el FPS 30 proporciona un 96,7 %. Sí, un FPS más alto significa mayor protección, pero la diferencia es menor de lo que crees.
- El FPS no determina el tiempo de exposición solar: El FPS no informa a los consumidores sobre el tiempo que pueden pasar al sol sin quemarse. Esto subraya la necesidad de concienciar y educar sobre los límites de exposición solar.
- La aplicación regular es crucial: independientemente del FPS, la aplicación regular de protector solar es esencial para prevenir quemaduras. Nuestros dispensadores Sundo están distribuidos por todo el país para fomentar y facilitar esta práctica.
Este factor de protección solar (FPS) no es solo un número en el envase del protector solar; es una medida crucial de la protección de la piel contra la radiación UVB. Mediante rigurosas investigaciones, hemos descubierto que los valores de FPS más altos ofrecen mayor protección, pero quizás no tanta como cabría esperar. Por ejemplo, Williams et al. (2018), Russak et al. (2010) y Pissavini y Diffey (2013) han demostrado sistemáticamente que, si bien el FPS 50 bloquea aproximadamente el 98 % de los rayos UVB, el FPS 30 le sigue de cerca, con un 96,7 % de protección. Esto nos recuerda que, si bien un FPS más alto ofrece una mejor protección, la diferencia entre ambos puede ser menor de lo previsto.
Sin embargo, la función del FPS suele malinterpretarse. No indica cuánto tiempo se puede permanecer al sol sin quemarse. Este es un dato vital que a menudo pasa desapercibido, lo que lleva a una exposición solar prolongada sin la protección adecuada. Además, la eficacia del protector solar se reduce significativamente si no se aplica correctamente o en cantidades suficientes, como destacan Faurschou y Wulf (2007) y Bimczok et al. (2007).
Un error común es creer que un FPS alto puede ser la única protección contra los efectos nocivos del sol. Sin embargo, estudios demuestran que depender únicamente del protector solar, independientemente de su FPS, podría fomentar la exposición prolongada al sol, aumentando inadvertidamente el riesgo de daño cutáneo. Autier et al. (1999) destacan la importancia de un enfoque holístico para la protección solar, que incluye no solo la aplicación de protector solar, sino también buscar sombra y usar ropa protectora.
En conclusión, si bien el FPS es una herramienta útil para comparar el nivel de protección que ofrecen diferentes protectores solares, no ofrece una guía sobre la duración de la exposición solar. Aquí es donde interviene Sundo, con nuestros dispensadores inteligentes de protector solar, ubicados convenientemente en todo el país, para recordar a todos la importancia de la aplicación regular. No se trata solo del FPS, sino de cómo se usa.
No olvidemos que la clave para una protección solar eficaz reside en la aplicación regular. Independientemente del FPS, reaplicar el protector solar es crucial para evitar quemaduras y garantizar una protección continua. Por eso, nuestros dispensadores Sundo están ubicados estratégicamente en todo el país, facilitando la protección de todos, en cualquier momento y lugar.
Al adoptar un enfoque integral para la protección solar, recordemos que la innovación, combinada con la educación, allana el camino hacia mejores resultados de salud. Manténgase protegido, infórmese y hagamos de la protección solar una prioridad para todos.